Las Kardashian y su obsesión por llamar la atención en las redes

Las Kardashian y su obsesión por llamar la atención en las redes sociales parece no tener límites, siempre hay algo nuevo, llamativo o  escandaloso. Ya no son solamente un fenómeno estadounidense, han cruzado las fronteras y son internacionales. ¡Que viva la globalización!

Pero en realidad, lo verdaderamente impresionante es que las Kardashian son un imperio digital. Más allá de los millones de dólares generados en publicidad, su fama nacida de la reality TV, o sus aventuras empresariales, ahora se han convertido también en la familia con más alcance en las redes sociales.

Hagamos un muy breve análisis y veamos su presencia, concretamente en Instagram. Resulta que si sumamos todas las cuentas de los Kardashian (incluyendo la de su hermano Robert) el número total de seguidores es de 269.4 millones. Independientemente de si una persona que sigue a Kim también sigue a las otras hermanas, estamos hablando de un total superior a la población de Indonesia, la cuarta del mundo (257,858,624 millones de personas), y más de la mitad de la población de los Estados Unidos (323,383,364).

La primera de la familia en liderar Instagram es Kim con 62.6 millones de fans que la siguen a diario, quien curiosamente fue la primera en alcanzar el estrellato. En segundo lugar están las hermanas modelos; Kylie (53.5 millones) y Kendall (50.9 millones). Vale la pena acotar que ambas fueron reconocidas por la revista Time en 2014 como las más grandes influencias adolescentes en los Estados Unidos.

Por otro lado, Khloé cuenta con 44.1 millones de adeptos, Kourtney no se queda atrás y también presume de una muy respetable cifra de 35 millones de followers. Y la progenitora, la responsable de darle vida a todas estas máquinas de ganar seguidores en las redes sociales, también forma parte del exclusivo club de las cuentas con dos dígitos, a Kris Jenner la siguen 11.6 millones de personas. En los últimos lugares se encuentran Caitlyn Jenner 6.2 millones, y el único hombre de la familia, Robert Kardashian, con 4.9 millones.

Moraleja, ¿de verdad necesitan estar todos los días buscando la manera de revolucionar o llamar la atención en las redes? ¿Por qué se tienen que convertir en protagonistas imperiosos de la conversación mediática en cada foto o aparición publicada en las diferentes plataformas sociales?

Es una obsesión, no paran. Lo más preocupante de todo es que las Kardashian nos muestran un mundo casi imposible para muchos. Viven en una especie de aislamiento ante los verdaderos problemas que el resto del mundo padece.

Más allá de la cultura egocéntrica de la familia, lo más reprochable es que sin duda los continuos momentos de irresponsabilidad a la hora de usar su estatus de estrellas de alto perfil. Por ejemplo, los desnudos de Kim tienen millones de likes. Kylie y Kendall constantemente desafían la red social con fotos subidas de tono. Acto seguido, todos los medios escriben sobre eso; y de verdad ¿quién los culpa? Las Kardashian son generadoras de tráfico online.

El punto es que el clan Kardashian es una familia que posee una influencia clara y directa sobre todas las generaciones. ¿Por qué no se proponen, aunque sea de vez en cuando a utilizar su fama y habilidades digitales para mostrar algo más positivo? La atención global la tienen, el dinero también, y ahora les toca ser responsables con su fama.