Jessica Leeds de 74 años, asegura que se sentó en un vuelo con Donald Trump en los 80s, y el señor le tocó los senos y trató de meterle la mano debajo de la espalda, de acuerdo con The New York Times.
“Era como un pulpo, sus manos estaban por todas partes”, dijo Leeds.
Otra mujer, también declaró al Times sobre la conducta inapropiada del candidato republicano. Rachel Crooks trabajaba como recepcionista en una compañía de bienes raíces ubicada en el Trump tower, y en el 2005 se encontró con Trump afuera de un asensor. El magnate empezó a besarla, incluso en los labios y ella califica el encuentro como inapropiado.
La campaña del candidato a la presidencia de los Estados Unidos, emitió un comunicado a través del vocero Jason Miller.
“Este artículo es ficción, que el New York Times publique este tipo de difamación contra el señor Trump, en un tema como este, es muy peligroso”. Miller dice que de esta forma se está trivializando el abuso sexual, y es absurdo que uno de los empresarios más importantes del planeta haga semejantes cosas narradas en esa historia. Además, le es muy extraño que estas declaraciones surjan a solo un mes de las elecciones.
La campaña también expresó que el medio había caído muy bajo, y que todo esto no era más que un ataque político.
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