Por segundo año consecutivo, Alejandro González Iñárritu se llevó el Oscar a Mejor director, esta vez por su trabajo en The Revenant, poniendo el nombre de los latinos muy en alto en la entrega número 88 de estos codiciados premios a lo mejor del mundo del cine.
Además de agradecer a Leonardo DiCaprio, Tom Hardy, Emmanuel Lubezki y y a todo su equipo de producción, el cineasta mexicano se aseguró de hablar sobre la falta de diversidad en Hollywood. “Soy muy afortunado de estar aquí hoy, desafortunadamente muchos no tienen la misma suerte. Liberémonos del prejuicio y hagamos que el color de la piel se vuelva tan irrelevante como el largo de nuestro cabello”.
Iñárritu no fue el único latino que brilló en esta ceremonia pues el “El Chivo” Lubezki alzó la estatuilla a Mejor fotografía por su trabajo en The Revenant, convirtiéndose en la primera persona en la historia de estos galardones en ganar esta categoría en tres ocasiones. En su discurso de aceptación, el cinematógrafo mexicano le agradeció a su “compadre” Iñárritu por la oportunidad de trabajar en este gran filme.
Por si fuera poco, Chile se llevó su primer premio Oscar gracias a Bear Story, que se coronó como Mejor cortometraje animado. Los productores Gabriel Osorio y Patricio “Pato” Escala subieron al escenario del Dolby Theater para aceptar este merecido premio por su película. “Somos de un pequeño país llamado Chile, este es el primer Oscar para nuestro nación, así que esto es muy importante para nosotros”, dijeron terminando su discurso gritando “viva Chile”.
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