Donald Trump y su manía de
Greg E. Mathieson Sr./REX/Shutterstock

En una esquina tenemos a Donal Trump, el precandidato republicano con altas probabilidades de ser escogido como el representante de su partido a optar por la presidencia de los Estados Unidos, y del otro lado tenemos a todas las mujeres que han pasado, o no, por la vida del magnate.

¿Qué pasa cuando el billonario ataca y descalifica a las mujeres haciendo comentarios impropios y hasta viscerales? ¡Pues entramos en pánico! porque simplemente es muy preocupante ver como alguien que va a liderar el país más poderoso del mundo no tiene el más mínimo pudor al hacer comentarios denigrantes.

La pelea es peleando, y ya van más de nueve rounds. Nadie ha salido vencedor y esto aunque pareciera ser una historia de nunca acabar, podría ser concluido, irónicamente, por una mujer. O, si lo queremos poner en términos de boxeo, el knock-out a Trump le podría venir de las manos de una fémina. Así que esperemos para ver en primera fila lo que se trae Hillary Clinton.

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Sin embargo, a pesar de la constante atención mediática que capta el empresario, no nos dejamos de sorprender por los titulares que encabeza diariamente. Igualmente es muy interesante ver a todas las personalidades que hablan públicamente de sus malas experiencias con Trump. Los más extraordinario –total sarcasmo- es que todas coinciden en que el candidato republicano es un déspota, lo acusan de abusar del poder, de ser prepotente, y para rematar, también lo catalogan como racista, y si no me creen, pregúntenle a la actriz venezolana, Alicia Machado.

Machado es la personalidad que más recientemente ha hablado públicamente de los vejámenes que sufrió cuando fue Miss Universo, durante el tiempo en que el concurso estaba en las manos de Trump. Mejor ejemplo que este imposible, la exmiss asegura que el magnate le dijo de todo, especialmente “Miss Piggy” y “Miss Housekeeping”. ¿Es esta la persona que podría estar a cargo de un país? ¡Insisto, que pánico!

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¿Nos hemos convertido las mujeres en el verdadero dolor de cabeza de Trump? El candidato debería entender algo, en una de las más recientes encuestas publicada por CNN (finales de Marzo de 2016) se muestra que un 74% de las mujeres de los Estados Unidos no tienen una visión positiva del republicano. Tan es así que cada vez que el candidato ataca públicamente a una mujer, su popularidad tiende a desplomarse entre el electorado de mujeres votantes.

Heidi Cruz, Magyn Kelly, Rossie O’ Donell, Lena Dunham, y Carly Fiorina son algunas de las personalidades que han pasado por los epitafios de insultos del empresario/personalidad de reality show convertido hoy en día en político. Demás esta decir que los ataques a Clinton también están a la orden del día porque su estrategia es criticarla por ser mujer – hasta chillona la llamó.

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Uno de los golpes más duro que ha recibido el candidato está en el más reciente artículo publicado por The New York Times, en el que se habla de su tormentoso pasado con varias mujeres que formaron parte de su vida – 50 en total. El medio asegura haber entrevistado a decenas de mujeres que han tenido algún tipo de relación o intercambio con Trump, las conclusiones son claras: el comportamiento del magnate es perturbador.

Y no dejemos de hablar de las veces en las que el precandidato republicano, después de meter la pata, se queda sin argumentos. En esos momentos su familia, concretamente las féminas Trump (hijas y esposa) salen a defenderlo, pero esto no es suficiente porque ya el daño está hecho.

Si lo que Trump buscaba al descalificar e insultar a vox populi a las mujeres era el rechazo del electorado femenino, entonces podemos decir que cuenta con una misión cumplida.

Asimismo, si Trump es misógino, o tiene un problema con las mujeres, pues no le queda otra que comenzar a entender que si realmente quiere ser presidente de los Estados Unidos de América, no le queda otra que adaptarse y comenzar a cambiar su actitud. ¿Es posible? Loro viejo no aprende a hablar. De corazón, le deseamos toda la suerte tratando de persuadir y convencer a más del 74% de las mujeres que podrían votar por él.

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