El 13 de septiembre fue lanzada a la venta la autobiografía de Naya Rivera titulada Sorry Not Sorry, donde la actriz revela que en el 2010 se sometió a un aborto durante un día de descanso de las grabaciones de Glee.
La actriz tomó la decisión después de terminar su relación con Ryan Dorsey para enfocarse en su carrera y no consultó con él su intención de abortar. Lo que no se imaginó la artista es que años después retomaría su relación con Dorsey y que se casaría con él, por lo que durante su aparición en el talk show The Real, las presentadoras no aguantaron la curiosidad y le preguntaron cómo reaccionó Dorsey cuando se enteró sobre el aborto.
Rivera aseguró que su esposo se comportó como todo un príncipe y le dijo lo que cualquier mujer hubiese querido escuchar en un momento como ese.
“Me dijo, ‘sabes, en el poco tiempo que salimos juntos me hubiera gustado haber hecho las cosas diferente para hacerte sentir que hubieras podido confiarme esa información, porque me hubiera encantado estar ahí contigo'”, recordó la intérprete, quien en septiembre del 2015 dio a luz a Josie Hollis, su primer hijo con Ryan.
“Creo que fue lo más amable y lo mejor que cualquier hombre pudo haber dicho en esa situación”, reveló. “Me hizo amarlo mucho más y le agradezco por eso”.
Previo a la publicación del libro, Rivera escribió un ensayo para el diario USA Today en el que indicó la razón que la motivó a hablar públicamente sobre su aborto.
“Sabía que al compartir mi historia sería juzgada por la decisión que tomé. Pero quería dejarle saber a otras mujeres enfrentando la misma difícil decisión que no están solas”.
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