La película “Blackfish” nos mostró el otro lado de SeaWorld —específicamente, como tratan a sus ballenas orcas. La conmovedora película ahora ha inspirado al asambleísta de California, Richard Bloom, a proponer una ley prohibiendo los shows de orcas en los parques del estado.
Bloom propuso la ley el 7 de marzo y quiere prohibir que las orcas sean parte de los espectáculos, prohibir la cría en captura y prohibir la importación y exportación de las ballenas ‘asesinas.’
“Blackfish,” que hizo su debut en el Sundance Film Festival en en 2013 y después fue transmitida en la cadena CNN, ha causado una indignación internacional. El documental se trata de la muerte de la entrenadora Dawn Brancheau, quien fue asesinada por la orca Tilikum de SeaWorld, entre otros eventos trágicos como resultado del tratamiento inhumano a las orcas. Pero las entrevistas con los ex-empleados de SeaWorld que trabajaron allí durante ese tiempo revelan que no fue sólo una orca actuando violentamente, este es un animal que durante muchos años ha vivido en condiciones deplorables en SeaWorld y por lo tanto sufre de traumas.
“No hay ninguna justificación para tener a las orcas en captura para la continuada exhibición del entretenimiento,” dijo el asambleísta Bloom. “Estas hermosas criaturas son demasiado grandes y demasiado inteligentes para estar atrapadas en tanques pequeños durante toda su vida.”
La ley propuesta prohibiría a las orcas de formar parte de un show, pero los parques todavía tendrían el derecho de exhibir a las ballenas en acuarios. La ley sólo se aplicaría en California, pero ojalá que los demás estados implementen lo mismo.
SeaWorld genera una inmensa cantidad de dinero— $9.6 millones al año — y por lo menos en San Diego, Bloom parece no ser el único que apoya esta ley.
“SeaWorld ha tenido una mala reputación de tratar a sus trabajadores mal desde que se abrió hace 50 años,” dijo la asambleísta de California, Lorena González, quien representa a San Diego. “Es hora de continuar esta conversación sobre la seguridad y la calidad de trabajos en SeaWorld — especialmente con los entrenadores de ballenas. Me interesa mucho tener una conversación honesta sobre las prácticas de SeaWorld y cómo ellos pueden ser realmente un ícono que enorgullece a San Diego. “
SeaWorld mantiene que “Blackfish” es una versión “manipulada” de lo que sucede en sus parques. En un comunicado SeaWorld dijo que la película “emplea secuencias falsas y emocionalmente manipuladoras. Se basa en ex-empleados de SeaWorld, la mayoría de los cuales tienen poca experiencia con orcas y otros que no han trabajado en SeaWorld en casi 20 años y depende de activistas de derechos de animales que se disfrazan como científicos.”
Si no la has visto todavía, puedes ver “Blackfish en Netflix.
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