Donald Trump nunca quiso ser realmente presidente, eso es lo que asegura el cineasta Michael Moore en una nueva columna publicada en The Huffington Post en la que indica que la idea de aspirar a la presidencia se le ocurrió al millonario para obtener un contrato más lucrativo con NBC por su participación en el show The Apprentice.

La idea, según explica Moore, quien asegura tener conocimiento de la situación de primera mano, era que Trump demostrara su poderío y su aceptación entre la gente para que la cadena de televisión considerara su oferta inicial y le ofreciera más dinero al ahora candidato por el partido republicano. Lo que ocurrió tomó por sorpresa a todo el mundo, incluido Trump.

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“En junio 16 del año pasado, bajó su escalera dorada y abrió su boca. Sin equipo de campaña, ni infraestructura de campaña en cualquiera de los 50 estados, cosas que no necesitaba porque recuerden, esta no sería una campaña real”, escribió el documentalista.

Aunque sus insultos contra los inmigrantes mexicanos le valieron a Trump su salida de NBC, el empresario se convirtió en todo un fenómeno, una situación que de acuerdo a Moore el aspirante a la presidencia se dedicó a celebrar, esto hasta el día en el que se dio cuenta que realmente podría convertirse en el candidato a la presidencia por el partido republicano tras ganar las primarias de Nueva Jersey.

“En vez de ser uno de sus fuertes e impetuosos discursos, este fue deprimente. Sin energía, sin felicidad, ya que comprendió que iba a tener que seguir con este truco que empezó. No se trataba de una actuación. Ahora tendría que trabajar”, señala Moore.

Tras convertirse en el candidato oficial de los republicanos para la presidencia, la teoría de Moore apunta a que ahora es el mismo Trump quien quiere sabotear su campaña para evitar a toda costa convertirse en presidente.

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“Muchos ahora presienten que es el final del juego porque saben que Trump realmente no quiere el trabajo, y aún más importante, no puede y no quiere ser oficialmente y legalmente un perdedor declarado la noche del 8 de noviembre”.

¿Habrá algo de cierto en esta teoría?

 

 

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