Este lunes 14 de diciembre es el estreno norteamericano de Star Wars: The Force Awakens, evento que se llevará a cabo en Los Ángeles, California. Los organizadores de la esperada premier han reforzado al máximo las medidas de seguridad para esta importante ocasión. La cinta de J.J. Abrams es uno de los eventos más grandes jamás realizados, tendrá alrededor de 5000 invitados y la cinta será exhibida al mismo tiempo en el Dolby Theatre, en el Capitan Theatre y en el TCL Chinese Theater.
Hollywood Blvd., una de las avenidas más populares de la ciudad, se encuentra cerrada desde la semana pasada en preparación para la alfombra roja que está cubierta por una gran carpa. En el lugar hay perros antibombas y para ingresar a la calle los transeúntes deben pasar por los detectores de metales que hay en cada esquina de los callejones que rodean el evento.
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Por si fuera poco, los fanáticos que quieran ver a sus estrellas favoritas caminar por la alfombra no podrán tener la cara cubierta ni se les permitirá entrar con armas de juguete: “Por su seguridad les pedimos dejar las máscaras, caretas y cualquier otro artefacto que obstruya la visibilidad de la cara, así como maquillaje, sables de luz, pistolas y cualquier otro armamento”, explicaron los representantes de Disney a sus invitados a través de un email.
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